Escuela Infantil Bambinos | Aprender a leer - Escuela Infantil Bambinos
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Aprender a leer en edad infantil

Aprender a leer

Interesarse por las historias y los cuentos sucede a partir de los 3 años de edad. Y nuestros pequeños pueden empezar a aprender a leer recibiendo estímulos apropiados entonces…

 

Importante que aprecien la lectura y que para ellos sea un descubrimiento. En el caso de sentirse obligados, acabarán relacionándola como algo forzado y tedioso, que rechazará en un futuro.

 

En el segundo ciclo de la Educación Infantil, los niños se acercan a la etapa de la lectoescritura. Que un niño aprende antes o después a leer, va a depender de la correcta estimulación que recibe. Trabajando con ellos de forma adecuada, el proceso se acelera adelantando su aprendizaje.

 

A los 3 años, ya van entendiendo palabras, y a partir de entonces pueden empezar a leer si nos esforzamos para que lo consigan.

 

 

Resumiendo, el estándar de un aprendizaje normal sería:

 

A partir de los dos años empiezan a mostrar interés por los dibujos de los cuentos que les mostramos y comienzan a escucharnos al contarles las historias.

 

A los tres años aumenta su interés por la literatura infantil llegando a ser capaces de captar el sentido y el significado de las narraciones.

 

A los cuatro es el comienzo de trabajar la lectoescritura en los centros educativos siendo evidente el interés de los más pequeños por leer y entender nuestro lenguaje.

 

Con cinco años, están muy capacitados para embarcarse en la aventura de aprender a leer.

 

No todos los niños son iguales, y no todos aprenden al mismo ritmo, lo que significa que no debemos preocuparnos si los nuestros aprenden un poco más tarde, porque con el tiempo no habrá diferencias entre los que aprendieron antes y los que aprendieron después…

 

 

Consejos para la iniciación:

 

Hay que destinar tiempo para leer con ellos

 

Dejar libros en sus habitaciones para que nuestros hijos disfruten a solas y por su cuenta

 

Leámosles libros con los que ellos disfruten

 

No insistamos en que nuestros hijos aprendan letras, números, colores, formas o palabras mientras estamos leyendo…